Clientes potenciales, target, estudios de mercado... Todo ello se quedará en agua de borrajas si no logramos que nuestro vídeo sea atractivo, y que nuestros seguidores lo compartan, lo vean y se interesen en el producto que queremos vender.
Pues bien, un vídeo optimizado para el marketing debe responder a las siguientes preguntas:
- ¿Qué es lo que quiere mi público? Conoce a tus seguidores.
- ¿Cuáles son las emociones que les van a identificar? Si logras emocionarlos, está hecho.
- ¿Durante cuánto tiempo se quedarán mirando para él? Los vídeos de corta duración impactan más.
- ¿Qué les va a llamar la atención? Deja para el final lo mejor.
- ¿Qué deben hacer después de ver el vídeo? Utiliza el Call to Action.
- ¿Dónde van a verlo? De cuantos más canales dispongan, más posibilidades hay de que lo vean.
- ¿Están mis redes sociales preparadas? Utilízalas como un elemento de marketing más.
- ¿Puede compartirse? Si los seguidores lo comparten, llegaremos a más gente.
- ¿Tienes el SEO y el VSEO optimizado? Las primeras posiciones en Google son las más vistas.
- ¿Qué resultados has obtenido? Evalúa las acciones.
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